Grandes Multitudes, Pequeños lugares.[Domino]

Una de las miles desventajas que tenia ser de clase baja era que no tenias la comodida de ir a algun lugar en coche. A menos que este fuera de tu señora.
Apesar de haber pasado largos años, era imposible decir que realmente te acostubrabas a eso.
Y mucho menos cuando vivias rodeada de tantos lujos que no te pertenecian.
Pero ese era el problema de las personas, siempre estaban interesadas en lo material.
No era que Drea considerara que estaba bien pasar trabajo o hambre, pero siempre habia un limite para las cosas, y ella estaba feliz de saber cuando llegaba a ese limite. O por lo menos eso creia ella.
Mientras bajaba por las escaleras, se preparaba para lo que podia encontrar.
A veces este tan repleto de personas que era imposible moverse. Otras no habia casi nadie, lo que era mas preocupante ya que en cualquier momento algun maleante podria sorprenderte.
Pero ella no estaba para quejarse. Sobre todo teniendo en cuenta su posicion economica.
Recogiendo un mecho de su cabello y colocandolo detras de su oreja, Drea apreto la bolsa con comida que habia preparado para su padre al cual visitaba cada vez que podia.
Sonriendo al ver que el lugar no estaba tan lleno, ni tan vacio, camino con energia para esperar al vagon.

Acababa de salir de visitar a una amiga en el hospital. Habia sido mama y su niña era preciosa.
Tenia que darme prisa, pues debia pillar el tren para llegar al Eternal a tiempo, o sino...no estaria alli para cenar con todas mis compañeras.

Suspire y entre a toda prisa a la estacion, buscando el anden de mi tren algo perdida...
Iba tan despistada que no vi a una chica que se cruzo y con la cual tropeze, tambaleandome un poco sin llegar a caer.

Alce la vista y la mire, sonrei levemente algo abrumada. -Disculpame, iba con prisa y no te vi, perdona.- Le dije sincera.

A Drea lo unico que le aviso que tropezaria con otra persona fue la gran sacudida que se llevo cuando esto sucedio.
Mientras se alertaba de nuevo, escucho las disculpas de la chica con quien habia tropezado.
- No te precupes... - le dijo mientras revisaba el contenido de su bolsa, encontrando todo en buen estado.- Yo tambien voy con un prisa. Con suerte tomare el tren antes que se vaya.- le sonrió.

La mire atenta y sonrei, al ver que la chica era amable. -Vas al centro ?- Murmure colcoandome la ropa en su sitio adecuado, que por la sacudida se me habia subido un poco.

Camine junto a ella sin saber muy bien hacia donde me dirigia, tan solo andando. -Soy un despiste total...no se como no me cai desde luego.- Dije a la chica, pidiendole disculpas de nuevo con otras palabras.